1. No herir sentimientos. Los hombres prefieren decir una mentira, a lastimar los sentimientos de una mujer. Es preferible decir que no llegó a la cita porque tenía mucho trabajo, que confesar que estaba muy cansado y prefirió irse a su casa a dormir. Ella se sentiría muy triste al saber que eligió irse solo a su casa, que pasar una tarde-noche con ella.
2. Para impresionar. Ciertos hombres suelen exagerar sus cualidades, como posición económica, amistades, gustos, etc., con el objetivo de atraer la atención de la mujer que desean. Esto usualmente se da durante el periodo de conquista, pero en cuanto pasan a la siguiente etapa, el show se les viene abajo.
3. Evitar problemas. Aunque dicen que las reconciliaciones son muy buenas, en muchos de los casos prefieren mentir para evitar problemas. Este tipo de mentiras normalmente las aplican los hombres casados, ya que al conocer las cosas que le disgustan a su esposa, prefieren decir una mentira "blanca" a iniciar una discusión eterna.