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| Por el crimen de Ada L. Santiago Aponte, a Nelson Rivera Cruz se le impuso una sentencia de 30 años de prisión; el hombre salió en libertad bajo palabra en 2012. (Suministrada) |
El crimen a machetazos ocurrido el pasado miercoles en la urbanización Villa Nueva de Caguas es casi una copia exacta del asesinato que cometió el mismo agresor hace 16 años cuando también ultimó a su pareja.
Nelson Rivera Cruz, de 52 años, llamó al sistema de emergencias 9-1-1 a las 7:34 p.m y le indicó al operador “maté a mi pareja”. Luego, dictó la dirección del lugar de los hechos un tanto imprecisa y se identificó por su nombre. La admisión de los hechos quedó grabada como evidencia.
Nelson Rivera Cruz, de 52 años, llamó al sistema de emergencias 9-1-1 a las 7:34 p.m y le indicó al operador “maté a mi pareja”. Luego, dictó la dirección del lugar de los hechos un tanto imprecisa y se identificó por su nombre. La admisión de los hechos quedó grabada como evidencia.
Minutos antes, según la pesquisa preliminar del crimen, el individuo sostuvo una discusión con su pareja, Nadgie Cintrón Vázquez, de 43 años y se armó de un machete con el que la hirió en un hombro, el rostro y el cuello, causándole la muerte en el acto.
Luego de cometer el asesinato, Rivera Cruz, quien laboraba como empleado de mantenimiento del Hospital Menonita de Caguas, ingirió una gran cantidad de medicamentos intentando envenenarse. Al desplomarse sufrió una fractura craneal y quedó inconsciente.
Cuando la Policía llegó al lugar del crimen, divisaron el cadáver masacrado de Cintrón Vázquez y a su pareja en condición grave. El hombre permanece hospitalizado en el Centro Médico de Río Piedras.
Dieciséis años atrás, un 31 de julio de 1998, Rivera Cruz, asesinó a su esposa. Según se desprende de los archivos de la Policía a los que tuvo acceso este medio, ese día a las 4:07 p.m. se recibió una llamada a través del sistema 9-1-1, la cual fue atendida por el retén de la Comandancia de Humacao. En la comunicación solicitó que enviara una patrulla a la calle Valle Verde, en la urbanización Vevé Calzada de Fajardo, porque había matado a su esposa.
De acuerdo al informe de novedades redactado para esa fecha, basado en el testimonio del propio Rivera Cruz, llegó hasta la calle principal de la urbanización donde detuvo a un vecino y abordó su vehículo indicándole que no tuviera miedo y que lo llevara al cuartel de Fajardo porque había asesinado a su esposa, Ada L. Santiago Aponte, de 33 años.
Vistiendo una camisa amarilla ensangrentada, Rivera Cruz entró al cuartel donde narró su crimen. Santiago Aponte había abandonado el hogar, pero regresó a la casa, aunque tenía previsto separarse de Rivera Cruz. Al regresar a la casa le pidió a su hija que permaneciera en su habitación mientras conversaba con su esposo.
La fémina le dio la espalda para mirar en dirección hacia una ventana y una puerta del hogar cuando fue atacada con un machete por el cuello. El reporte precisa que ella logró virarse y le cuestionó, “¿qué hiciste?”, mientras el hombre continuaba hiriéndola en la cabeza los brazos y el rostro.
Su hija salió de la habitación implorándole que no matara a su madre, pero Rivera Cruz le exigió que se encerrara en su cuarto, según revelan los archivos policiacos.
La escena del asesinato de Santiago Aponte parece similar a la ocurrida anoche en Caguas, salvo que en el apartamento no había otras personas, solo la pareja, que tenía un año de relación. Además, después de ultimar a su esposa en 1998, Rivera Cruz no atentó contra su vida, como hizo el miércoles, después de llamar al sistema de emergencia 9-1-1.
Por el crimen de Santiago Aponte, a Rivera Cruz se le impuso una sentencia de 30 años de prisión. El hombre salió en libertad bajo palabra en 2012, indicó César Fiallo, portavoz del Departamento de Corrección y Rehabilitación.
Fuente: Primerahora.com
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